Desde 1934, el Hospital Santa Catalina ha venido desempeñando un papel fundamental en la Sanidad Canaria, siendo su perfil más identificable “la maternidad”. Actualmente, dentro de su área de influencia es el único hospital privado con servicio de obstetricia. Más de 50.000 canarios han nacido en este centro y en algunos casos hasta tres generaciones de una misma familia han visto la vida entre sus paredes.
Pero es en estos últimos años cuando“ la maternidad” repunta con la creación de un servicio propio incorporando un equipo de ginecólogos y matronas, dirigidos por el Dr. Sebastián Hernández y por Ángel Estrada, que junto con un consolidado grupo de enfermeras y auxiliares, configuran el equipo humano del Servicio de Obstetricia. Todos ellos tienen como misión atender y cuidar el bienestar físico, emocional y social de la mujer embarazada, de forma que se asegure el nacimiento del nuevo integrante de la familia en las mejores condiciones posibles.
A continuación, plasmamos el artículo que se publicará en la revista La Salud escrito por la Directora de Enfermería de Hospital Santa Catalina, Doña Maria José Garfias. En las siguientes líneas Maria José explica como además de contar con un equipo de reconocido prestigio, cual son los aspectos que marcan la diferencia y pueden resultar de interés a las personas que estén próximas a la maternidad.
Preparación al parto
Cuando ya ha llegado este momento, es muy importante contar con un equipo de profesionales que nos brinde información y confianza. Es fundamental:
- Proporcionar a las futuras madres la información necesaria para que tome un papel activo en el momento del parto, entregándoles consejos prácticos que contribuyan a disminuir las complicaciones maternales y fetales.
- Vivir el trabajo de parto con tranquilidad, sin ansiedad, ni miedos.
- La “Escuela de Padres”, que proporciona información sobre lactancia materna y sus beneficios así como los cuidados del recién nacido.
La intimidad del momento
La atención profesional y personalizada en el parto, no solo se limita a las atenciones sanitarias sino que también promueve especialmente la intimidad, la seguridad y el fomento de los vínculos afectivos. Se desarrolla el parto con estas características:
- Presencia en el parto de matrona, anestesista, ginecólogo, pediatra y personal de enfermería.
- Procedimientos de seguridad, practicando una filosofía de no intervencionismo, limitando el número de exploraciones y potenciando un lazo de unión entre la parturienta y la matrona.
- Utilización de analgesia con técnicas seguras tanto para la madre como para el feto.
- Identificación inequívoca del recién nacido con pinza umbilical y brazaletes con código de barras para la madre, el recién nacido y la historia; más las huellas digitales y plantares en la historia.
- Reconocimiento inmediato del estado del recién nacido por el pediatra, valoración antropométrica y cuidados profilácticos por la matrona, con la presencia del padre.
- Paritorios individuales que permiten la permanencia del padre durante todo el proceso, manteniendo la intimidad de la embarazada. Este momento es único para la mujer, no obstante hay que fomentar la comunicación temprana del trinomio madre, padre e hijo.
- Con el fin de reforzar los vínculos afectivos a través del contacto y el reconocimiento mutuo, el recién nacido es depositado en el vientre materno para favorecer el contacto piel con piel.
En el hospital, pero como en casa
Durante la estancia hospitalaria, brindamos una especial atención a la familia:
- Una vez finalizado el parto, los padres y el recién nacido regresan juntos a la habitación de ingreso y continúan estando juntos durante toda la estancia en el hospital, las 24 horas del día. Los diferentes profesionales (pediatra, matrona o enfermero/a) harán los controles y exploraciones de seguimiento del recién nacido, incluido el baño del mismo, en la habitación y en presencia de los padres.
- El hospital no tiene limitaciones de horario de visitas, sino que lo gestionan los padres.
- Educación sanitaria por parte de enfermería en la habitación sobre la lactancia materna, el puerperio y atención al recién nacido, facilitando la posibilidad de expresar sus dudas y potenciar el aprendizaje de los cuidados de su hijo.
- Recomendaciones de enfermería al alta.
Y en casa, con todos los cuidados
Contamos con la atención de enfermería al puerperio domiciliario, dirigida a la mujer y al recién nacido para seguir la evolución, el estado emocional y posibles complicaciones
Una enfermera (DUE) hará dos visitas al domicilio previamente concertadas el día del alta:
- Primera visita: aproximadamente a los 2 días siguientes del alta del hospital.
- Segunda visita: a los siete días posteriores a la primera.
Atención al suelo pélvico
Es frecuente que después del parto se presenten problemas de incontinencia, disfunción sexual, etc., por ello es aconsejable una evaluación a las seis semanas del parto para una detección precoz del daño del suelo pélvico. Nuestro equipo ofrece a cada paciente la consulta y tratamiento con profesionales especializados en este sentido.
A la vanguardia
Los aspectos mencionados, más nuevos proyectos como el cribado neonatal ampliado o la recogida de células madre, a implantar en fechas próximas, hacen que seamos elegidos por más de 1200 madres al año. Sin lugar a dudas podemos decir que hemos iniciado el camino hacia la excelencia.
